La segunda jornada de huelga de maquinistas de Renfe, en protesta por la reducción de casi 700 trabajadores, está siendo todo un éxito; prueba de ello, el nerviosismo de políticos y empresa, las amenazas a los trabajadores con la apertura de expedientes, el retraso generalizado de trenes, cancelaciones…
Con la excusa de la Covid, Renfe había venido restringiendo la circulación de muchas líneas de cercanías y de media distancia, como ya denunciaron los propios maquinistas este mismo año.
Este agosto pasado Renfe suprimió trenes de cercanías en Málaga, entre 26 y 82 según los días, debido a esa falta de maquinistas. Este hecho motivó que CGT convocara una huelga el día 12, exigiendo a Renfe incrementar el número de trabajadores además de mejoras en sus condiciones laborales.
Además de en Málaga, la falta de trabajadores y de trenes ha dejado aglomeraciones y largas esperas de viajeros en distintas zonas turísticas y de costa, como por ejemplo en Galicia, y de menos trenes, como el servicio de trenes Avant, que este mes de julio aún seguía recortado en un 30%.
Según el Sindicato Español de Maquinistas y Ayudantes Ferroviarios (Semaf), que representa al 85% de los maquinistas de Renfe, “el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana sigue incumpliendo los acuerdos sobre el traspaso de competencias en transporte ferroviario a las comunidades autónomas”.
Denuncia, además «la falta del restablecimiento de todo el empleo no cubierto y todas las circulaciones y servicios que han sido suprimidos en los últimos meses, el incumplimiento del II Convenio Colectivo de Grupo Renfe, y nula voluntad de solucionarlo, y el incumplimiento de todos los apartados acordados para la desconvocatoria de la huelga del 12 de febrero de 2021».
Por su parte, el Sindicato Ferroviario también se suma a los paros parciales que ha convocado Semaf, denunciando “la caótica situación en que se encuentra Renfe”. Ambos sindicatos ven la necesidad de enfrentarse a las pretensiones del Gobierno de segregar Renfe, incluyendo personal, trenes e instalaciones, transfiriendo competencias a las comunidades autónomas.
En medio de todo esto, Renfe negocia con la empresa privada el traspaso del transporte de mercancías. El sindicato Semaf denuncia que la dirección de Renfe ha aprobado la creación de una empresa privada de transporte de mercancías, así como la búsqueda de un socio privado con el que repartir a medias esa nueva empresa.
Los trabajadores denuncian que sus problemas siguen sin resolverse y el servicio singue sin operar al 100%, que lejos de dar una solución, Renfe juega a dos bandas con la privatización y mientras el Gobierno, como suele siendo habitual en él, mira hacia otro lado.
Renfe destruye empleos y busca hacer caja y con ello beneficiar a empresas privadas, mientras tanto sus cómplices políticos colaboran con el silencio. Son los trabajadores quienes hacen funcionar los trenes y para que este servicio público funcione tiene que recuperar la totalidad de la plantilla que Renfe ha suprimido.
Ahora los trabajadores tienen la oportunidad de no pagar con sus empleos los negocios de los capitalistas y de los que le hacen el juego.
Para ello hay convocadas huelgas, el 30 de septiembre y los días 1, 4, 5, 8, 9, 11 y 12 de octubre, coincidiendo con el puente de El Pilar.
¡POR ELLO, SOLIDARIDAD CON LOS TRABAJADORES DE RENFE!