Con la llegada del buen tiempo, se suceden las desgracias para los inmigrantes que deciden cruzar el mediterráneo. La última de estas tragedias en alta mar hace pocos días ha supuesto la muerte de entre 700 y 950 inmigrantes, niños incluidos, con rumbo a Italia.
Este naufragio constituye, por el número de desaparecidos, el peor ocurrido al sur del Mediterráneo en décadas; de momento solo han aparecido 24 cadáveres. Desde comienzos de año distintas fuentes hablan ya de 1500 muertos; hay que recordar que pocos días antes habían muerto de forma similar otros 400 inmigrantes.
Ante la amplitud de estas tragedias humanas y ante la hipócrita reacción de muchos líderes europeos, aquí en España Rajoy no se ha quedado corto y ha declarado: "Los europeos nos jugamos nuestro crédito si no somos capaces de evitar estas dramáticas situaciones". ¡Como vemos, para la derecha en España estas tragedias son tan sólo una cuestión de crédito!
La Organización Mundial de las Migraciones (OIM) pidió hoy a la Unión Europea que actúe para establecer una fuerza de rescate en el mar Mediterráneo de la misma envergadura con la que logró acabar con los piratas somalís. ¿Lo hará? ¿O no interesa?