Coca-Cola: ¿a la empresa de la felicidad le desaparece la sonrisa?

Stampa
noviembre 2014

Desde hace 9 meses, los trabajadores de la embotelladora de Coca-Cola en Fuenlabrada (Madrid) están en lucha contra el ERE. Han ganado el juicio contra la empresa, que debe readmitir a todos los trabajadores y pagar los sueldos. El 17 de noviembre, la empresa tendrá que cumplir la sentencia.

Las embotelladoras de Coca-Cola en España cuyos propietarios, como Sol Daurella la principal accionista, son unos de los más ricos del país, decidieron fusionar y reorganizar la producción con el objetivo de ser aún más rentable. Siguiendo la política del grupo Coca-Cola, sacó un plan llamado 20-20, cuya meta es duplicar los beneficios para 2020. La única manera de conseguir llegar a estos beneficios es destruyendo empleo y atacando los derechos laborales de los trabajadores. Lo hacen paso a paso, dividen y enfrentan a los trabajadores. Empezaron en Fuenlabrada, donde hubo una tradición de luchas que habían permitido mejorar las condiciones laborales.

En febrero, los trabajadores empezaron una huelga para evitar el cierre. La dirección intentó debilitar la lucha negando información sobre el ERE, promoviendo la división de los trabajadores y aumentando la productividad de otras fábricas para ocultar la falta de producto en Madrid. Por "esquirolaje" y negar el derecho a huelga, la Audiencia Nacional en Junio declaró nulo el ERE. Después del cierre a finales de marzo, los trabajadores han seguido movilizados, logrando durante estos 9 meses popularizar su lucha. Hicieron una campaña de boicot de los productos de Coca-Cola "Si Madrid no produce, Madrid no consume". Acudieron también a todas las luchas, el 22M, las mareas, los 8 de Airbus, en Zaragoza apoyando a los compañeros de PANRICO... Buscando apoyos con otros trabajadores en la misma situación, sabiendo que la unión hace la fuerza.

Con esta repuesta la dirección de la empresa tuvo que perder la sonrisa y van a enfrentarse mañana a una plantilla de nuevos trabajadores mas unidos por la lucha colectiva de estos 9 meses. La lucha permitió impedir los deseos de estos capitalistas y ahora tendrán que pagar.